En el tsunami urbanístico, lo más peligroso no es la primera ola, sino la segunda, expresó el geógrafo alemán Bernd Pfannenstein, durante la presentación de su trabajo “Problemática de la vivienda de interés social en el Área Metropolitana de Guadalajara”, en el foro que convocaron el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) y la Academia Mexicana de Desarrollo Urbano (Amdeur), realizado la mañana de este martes en el campus La Normal del plantel.
Según el geógrafo, el primer golpe que azotó el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) fue cuando se decidió relegar de las centralidades a las viviendas de interés social, y la segunda (que ya está ocurriendo) es la que tiene que ver con el crecimiento vertical,
“Esta ola no la estamos viendo, pero con cada edificio (que suele ser habitado por las clases privilegiadas) se cambian los valores del suelo, y eso implica que cada vez más vamos expulsando, aún más lejos, a quienes viven en casas de interés social. Esto, a la par de que no hay instrumentos de planeación que nos permitan dirigir el mercado del suelo para tener un sistema funcional”, mencionó quien ha sido profesor invitado por más de cinco años en la Universidad de Guadalajara (UdeG).
Este problema de segregación es una de las causas de que existan viviendas abandonadas; para ello, “la estrategia de vivienda social es equivocada, porque necesitamos dar alternativas a las personas de bajos ingresos y ponerlos en lugares céntricos, esto forma parte de un cambio de paradigma en las autoridades locales”, dio a conocer el geógrafo.

Este foro fue realizado con la intención de que sean escuchados especialistas e investigadores de este problema urbano, con el objetivo de proponer soluciones al abandono de más de 5 millones de viviendas en México.
Tlajomulco de Zúñiga es uno de los municipios emblema de esta situación que genera inseguridad, segregación y detrimento de la calidad de vida, puesto que esto ocurre en diversos fraccionamientos del municipio.
Pfannenstein mostró imágenes sobre fraccionamientos cerrados de Tlajomulco, cuyos habitantes no pueden acceder a servicios como escuelas, al verse obstaculizados por bardas que resultan absurdas y que incluso impiden la interacción entre vecinos de los cotos. “La convivencia en el espacio público es una solución a la delincuencia”, apuntó.
Recalcó la importancia de que se realicen diagnósticos precisos para evitar la segregación urbana. “Proponemos un monitoreo. Antes de tomar decisiones, necesitamos conocer la enfermedad del paciente, en este caso lo es la ciudad”, concluyó Pfannenstein.
“Cuando hay vivienda abandonada en la zona proliferan pandillas, drogadicción, insalubridad, disfunción familiar. En algunos casos las zonas fueron construidas en lugares de inundación y faltan servicios públicos. En algunos asentamientos hay deficiencias de los servicios públicos por encontrarse en las periferias”, detalló el presidente de la Amdeur, doctor Luis Antonio Rocha Santos,
Rocha Santos explicó que, con este encuentro, la UdeG y la Amdeur, mediante sus académicos, podrían aportar conocimientos y experiencias en la creación del Programa Nacional de Vivienda que actualmente trabaja el gobierno federal.
En el auditorio estuvieron presentes el director de la División de Estudios Jurídicos del CUCSH, doctor José de Jesús Becerra Ramírez; el director del Instituto Jalisciense de Vivienda, arquitecto Ernesto Padilla Aceves; la presidenta de la Federación de Asociaciones de Abogados de Jalisco, doctora Rosalinda Mariscal Flores.
Así como representantes de la Procuraduría de Desarrollo Urbano de Jalisco (Prodeur); de la Coordinación de Gestión Integral del Gobierno de Guadalajara, entre otras instancias relacionadas con la vivienda.
Con información de Prensa UdeG